El hospital San Carlos del Grupo HLA ha adquirido recientemente una bicicleta de decúbito para realizar ecocardiografías Doppler de esfuerzo.
“El dolor torácico o la fatiga al realizar esfuerzo físico, como subir escaleras o caminar por una pendiente, son síntomas comunes por lo que los pacientes acuden al cardiólogo. Lo habitual es que ese dolor o fatiga ya no esté presente en el momento de la consulta, por lo que el reto del médico es investigar qué sucedió cuando se presentaron los síntomas. Las pruebas que realizamos durante la consulta aportan información sobre el estado de su corazón en ese momento (habitualmente en reposo y sin síntomas), pero pueden no ser suficientes para llegar al diagnóstico”, explica el Dr. Alfonso Valle, Jefe de la Unidad Cardiocare del hospital San Carlos de Denia del Grupo HLA.
Para saber cómo se comporta el corazón en el momento de realizar algún esfuerzo , se deben reproducir las condiciones en un ambiente vigilado. Para ello, se indica habitualmente la realización de la prueba de esfuerzo o ergometría. El estudio del corazón en la prueba de esfuerzo se realiza observando continuamente el comportamiento de la tensión arterial y el electrocardiograma del paciente mientras camina o corre en una cinta rodante.
Otra prueba a disposición del cardiólogo es la ecocardiografía de esfuerzo. Según el Dr. Valle “la ecocardiografía de esfuerzo se realiza principalmente en bicicleta, combinando la información de la tensión arterial y el electrocardiograma. Además, en este caso, se visualiza el movimiento del corazón por medio de un ecocardiograma (ecografía del corazón) durante la realización del ejercicio y, dado que el paciente está en una posición semi tumbada, permite al cardiólogo observar en todo momento cómo funciona el corazón”.
Es, por tanto, un tipo de prueba de esfuerzo más completa que permite visionar si las diferentes partes de músculo cardiaco se contraen con normalidad durante la realización del esfuerzo, para descartar la presencia de alteraciones en las arterias coronarias, o valorar el funcionamiento de válvulas de corazón con el esfuerzo.
Esta técnica esta indicada para pacientes que presentan dolor torácico o disnea (fatiga) con el esfuerzo, para deportistas con sintomatología durante el ejercicio físico y para pacientes que presentan alguna valvulopatía y conocer así su funcionamiento y potenciales complicaciones durante el esfuerzo, que puede indicar la necesidad de reparar o reemplazar dicha válvula. También está indicado para pacientes que tienen lesiones en las arterias coronarias, para sentar la indicación de revascularización o no y para pacientes con insuficiencia cardiaca con fracción de eyección preservada (fuerza del corazón normal).
Se basa en una ecocardiografía del corazón mediante ultrasonidos, para la cual el paciente se sienta en la bicicleta desde donde se realiza una ecocardiografía completa, en la que se observa la contractilidad o la motilidad de los distintos territorios miocárdicos que a su vez dependen de distintas arterias coronarias.
El paciente comienza a pedalear bajo un protocolo prestablecido y adaptado a las condiciones físicas que va aumentando gradualmente. En cada etapa se registra, mediante unos electrodos, un electrocardiograma, la frecuencia cardiaca, la presión arterial y se observa la motilidad o la contractilidad de todos los territorios miocárdicos.