El hospital HLA Universitario Moncloa se posicionó en 2019 entre los principales centros privados de Madrid en el campo de la cirugía robótica urológica, al realizar 162 intervenciones laparoscópicas asistidas por el robot Da Vinci XI. Este y otros resultados se dieron a conocer durante el ‘II Curso de técnicas robóticas para el tratamiento de cáncer de próstata’, celebrado para especialistas de todo el país e impartido por los doctores Jesús Cisneros y Ángel Tabernero, responsables del Servicio de Urología del hospital madrileño.
Tras el análisis de la actividad quirúrgica desarrollada por el centro en urología el pasado año, el Dr. Tabernero indica que “la técnica robótica arroja resultados diferenciadores en el tratamiento de cáncer de próstata. Se observan mejoras sustanciales en los datos funcionales con un 90% de continencia precoz, un 95% de continencia tardía y hasta un 85% de preservación de la potencia sexual en pacientes en los que el estadio de la enfermedad ha permitido conservar los haces neurovasculares”.
Estos datos son muy esperanzadores, ya el cáncer de próstata afecta a uno de cada siete hombres a lo largo de su vida, siendo el cáncer más frecuente en varones y el segundo en mortalidad. Tan solo en España, el año pasado se registraron 34.000 nuevos casos.
La importancia que el colectivo médico le otorga a este problema de salud quedó plasmada en el ‘II Curso de técnicas robóticas para el tratamiento de cáncer de próstata’, al que acudieron una veintena de especialistas de Madrid, Ciudad Real, Sevilla, Murcia, Albacete, Guadalajara y Alicante. Durante dos días los profesionales fueron testigos directos de dos prostactectomías radicales y una biopsia fusión de la próstata, además de participar en ejercicios de simulación con las consolas desde las que los cirujanos manejan los brazos robóticos que realizan las intervenciones.
«La prostactectomía radical asistida con Da Vinci está especialmente indicada, con intención curativa, para pacientes diagnosticados con cáncer de próstata localizado y expectativa de vida superior a diez años. De los tres métodos posibles para llevar a cabo este procedimiento: cirugía abierta tradicional, laparoscópica pura y con asistencia robótica, esta última aporta una visión tridimensional donde la profundidad de campo permite un abordaje con mayor precisión y exactitud, con disecciones más finas y delicadas, respetando los tejidos circundantes”, explica Ángel Tabernero.
La dilatada experiencia con la que cuenta el equipo de Urología del HLA Universitario Moncloa es fundamental para trabajar con el robot, que reproduce con mayor precisión los movimientos del cirujano. Entre las ventajas de la cirugía robótica para los pacientes destacan la reducción de molestias y dolor postoperatorio, cicatrices más pequeñas, menor riesgo de infecciones y de pérdida de sangre, menor estancia hospitalaria y una recuperación más rápida.